Ante más de 80.000 personas portando pancartas azules con la palabra "cambio", el candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Barack Obama, aceptó con "profunda gratitud y gran humildad" su nominación.
Obama cautivó a los más de 80 mil personas reunidas en estadio Invesco de la ciudad de Denver y no defraudó a sus seguidores que salieron entusiasmados ante una nueva era en el Partido Demócrata.
En su discurso, Obama prometió poner fin a los problemas económicos que afectan en estos momentos a ese país y restaurar su papel de liderazgo a nivel mundial.
BBC-Mundo